Lo que uso y no recomiendo - Gustavo Yuste
Lo que sigue a continuación
es una historia real
Confieso que algo intuía,
por eso me preocupé más
por recuperar las cosas que le presté
antes que a salvar a toda la embarcación.
Después de las frases de rigor
y darnos una muestra gratis
de entendimiento y aceptación,
cada uno se fue por donde vino.
Ya separados por la avenida,
e igual que a una araña colgando
en la pared de la habitación,
ni bien le quité la vista de encima,
nunca más la volví a ver.
Tierra seca
No hizo falta mudarnos
ni redecorar nada
para sentirnos extraños
en nuestra propia casa:
alcanzó con quitarle el humor a las cosas
y ya no nos quedó nada
que sirva para sostenernos.
Un colectivo que pasa
nos hace notar que llueve
y una gota rompe la tierra seca
de esa planta
que abandonamos a consciencia
detrás de la persiana baja.
Maneras de mudarse
No dejé un cepillo de dientes,
una muda de ropa cómoda
o una máquina de afeitar.
Mi manera de mudarme
fue regalarte mi libro favorito
para poder tenerlo a mano
en caso de que la depresión
me pase a buscar por tu casa.
(Ph. Cari Aimé)
Gustavo Yuste nació en la Ciudad de Buenos Aires en 1992. Es Licenciado en Ciencias de la Comunicación (UBA), cofundador de la revista digital La Primera Piedra y forma parte de la editorial mágicas naranjas. Publicó los libros Obsolescencia programada (Eloísa Cartonera, 2015), Tendido Eléctrico, (Objeto editorial, 2016), Las canciones de los boliches (Santos Locos, 2017) y Lo que uso y no recomiendo (Modesto Rimba, 2018). En 2017 fue seleccionado como autor dentro de la categoría Letras de la Bienal Arte Joven Buenos Aires.